#ChildOfLight~Aurora POV~
Nuestro camino, el de Arrow, Forecast y mío, fue muy pesado a partir de entonces: decidimos ir primero en búsqueda del poder de la luna. Igniculus era un buen guía y una gran ayuda al pelear contra los monstruos de Umbra, ya que los cegaba y los retrasaba lo suficiente para que los demás atacáramos primero, o incluso atacáramos doble. Avanzamos mucho ese día y, al caer la noche, me dormí casi de inmediato.
En mis sueños pude verme en un campo de flores: era hermoso. Empecé a caminar feliz hasta que vi algo y me detuve: una misteriosa silueta.
—¿Aurora? —me llamó la silueta.
Después de eso pude ver bien de quién se trataba: una Alicorn de piel clara, como la mía, y cabello rojizo y flotante.
—¡Madre! —la saludé feliz.
—¿Cómo estás, mi niña? —preguntó ella.
—¡Bien! Quiero atrapar luciérnagas.
—¿Eso quieres? Entonces ve: están muy cerca de aquí.
Ella me dio un frasco de cristal. Me alejé sonriente y me puse a buscar entre los pastizales y ahí fue cuando las vi: una gran cantidad de puntitos brillantes. Con ayuda del frasco las recolecté una a una y luego regresé con la Alicorn.
—Madre, aquí están. ¿Qué haré con ellas?
—Cuidarlas mucho, hija mía, debido a que son el poder de las estrellas.
—¿De las estrellas?
De pronto vi que ella empezó a palidecer.
—¿Madre?
—Ya no me queda mucho tiempo —susurró ella—. Toma las estrellas contigo y también esta flauta.
Ella sacó una pequeña flauta amarilla, tocó una sencilla canción con ella y luego me la entregó.
—Cuando te sientas sola o triste, intenta tocar esa canción —me explicó ella—. Cuídate mucho, Aurora.
Justo después de eso, mi pecho absorbió el frasco con luciérnagas.
Abrí los ojos sobresaltada: ¡qué sueño tan extraño! No me aguanté las ganas de despertar a mis amigos y contarles.
—Aurora, es muy pronto para despertar —dijo Arrow mientras se tallaba los ojos con sus cascos.
—¡Perdón, pero era importante!
Les platiqué mi sueño: Arrow parecía adormilado pero Forecast me escuchaba sonriente.
—¿Saben qué es lo más ilógico? —pregunté—. ¡Que llamaba "madre" a esa Alicorn cuando mi mamá es alguien muy diferente!
—Los sueños a veces son así —respondió Arrow.
—¿La flauta era pequeña y amarilla? —preguntó Forecast.
—¿Eh? Sí.
—Entonces tal vez la viste antes de dormir: ¡mira!
Él señaló hacia un lado y yo volteé: en un tronco de árbol sobresalía una flauta idéntica a la que yo soñé y que estaba abandonada ahí.
—Tienes razón —contesté un poco apenada.
Le pedí a los demás que siguiéramos con nuestro viaje, pero tomé la flauta abandonada por una corazonada que tuve. Nosotros seguimos avanzando hasta que fuimos emboscados por unos seres similares a troncos caminantes que eran resistentes a los ataques que les lanzábamos. En eso estábamos cuando un ataque fuerte los golpeó y desapareció, al voltear vi a una unicornio adulta de crin y pelaje completamente blancos. Su Cutie Mark era un sol muy pequeño. Me parecía bonita.
—¿Están bien? —nos preguntó ella con una melodiosa voz y una amable sonrisa.
—Perfectamente —Forecast se adelantó volando y se acercó a recibirla con mucho interés.
—Sí, gracias —respondí sonriente—. me llamo Aurora, ¿quién eres tú?
—Mi nombre es Norah —respondió ella—. Estoy perdida. Encontré un espejo mágico y, al asomarme a ver mi reflejo, caí a través de él y llegué a este lugar.
—Nosotros también estamos perdidos —contesté.
—¿También? Qué triste —Norah me miró de cascos a cabeza—. ¿Tú elemento es la luz? El mío también. Pude ver que eres una Alicorn.
—Sí, soy una Alicorn como mi mamá.
—¿De verdad? ¿Y quién es tu mamá?
—Dark Saya.
Norah parecía confundida, pero me sonrió.
—No suena como el nombre de una Alicorn de luz.
—¿No?
En realidad, no me quedaba muy claro a qué se refería con "luz" y "oscuridad". ¿Se refería a "bueno" y "malo"?
—Pero no te preocupes, seguro es buena —dijo Norah.
—Es mejor seguir avanzando —nos interrumpió Arrow.
—¡Sí, yo voy con Norah! —dijo Forecast.
Norah aceptó unirse a nuestro grupo para no estar sola y era de mucha ayuda: ella usaba hechizos de luz para vencer criaturas de oscuridad.
Entramos a lo que parecía un templo que se elevaba en la montaña más alta: Igniculus nos explicó que ahí tenían a la luna, así que Forecast lo llamó simplemente el Templo de la luna. Adentro también había enemigos pero algo me sorprendió: casi al entrar al templo tres ogros, uno más grande que los otros dos, cuidaban un extraño espejo.
—¡Ahí! —Norah señaló con sorpresa—. ¡Ese espejo es idéntico al que me trajo aquí!
—¿Estás diciendo que...?
—¡Ese espejo podría llevarnos de regreso! —Norah interrumpió a Arrow.
Lo que ella dijo me dio esperanza: ¿qué tal si había una forma de evitar buscar la luna y el sol para regresar a nuestras casas? Me moría por ver a mis papás de nuevo.
—Tenemos que quitarles el espejo —les dije decidida.
Fue así que iniciamos la batalla: envié a Igniculus a cegarlos con su brillo mientras Norah usaba ataques de luz, yo mi espada, Arrow sus flechas y Forecast veía cómo distraerlos al volar alrededor de ellos. Sonaba más fácil de lo que era: uno de los ogros sacó un pequeño libro, leyó una página y nos lanzó a todos un hechizo eléctrico.
—¡Ahh!
Eso definitivamente no me lo esperaba. Además: el ogro más grande casi nos aplastó con un mazo debido a eso. Como el ogro del libro era un problema, decidimos derrotarlo primero. Con mucho trabajo lo logramos aunque eso significó que Arrow gastara todas sus flechas. Los otros ogros iban a enfrentarnos a Norah y a mí cuando el mismo hechizo eléctrico los aturdió pero no provenía de su compañero ogro sino de Forecast.
—¿Forecast? —lo miré sorprendida, él había leído el hechizo del libro.
—Guau, ¿funcionó? —preguntó él sin poder creerlo como nosotros.
Forecast volvió a hacer el intento: leyó hechizos de elementos como agua, fuego y electricidad, y estos golpeaban a los ogros, aunque los hechizos más poderosos de mi amigo eran los de electricidad. Finalmente vencimos a todos los ogros y nos reunimos a discutir.
—No sabía que los pegasos tuvieran magia —le comenté a Forecast.
—No la tienen, o no es normal —dijo Arrow.
—Buen trabajo —Norah le sonrió a Forecast y él comenzó a actuar extraño de nuevo.
—Lo que sea por ti —respondió.
Yo miré el espejo pensativa. Supongo que Norah se dio cuenta ya que se acercó a mí de inmediato.
—Es hora, intentemos cruzarlo.
—Las damas primero —dijo Forecast.
Norah y yo nos sonreímos y avanzamos juntas. Justo como ella había dicho, el espejo nos absorbió. Me moría por regresar a Equestria, correr a casa y platicarle todo a mamá y papá...
Pero eso no sucedió.
Abrí los ojos y noté que estaba en un sitio oscuro. Luego, escuché una voz aguda y tenebrosa.
—Así que tú eres Aurora, la pequeña fugitiva.
Vi llegar al sitio a una Alicorn muy parecida a mamá: de pelaje blanco, crin negra y larga, una corona plateada y con los ojos pintados de color púrpura. Usaba también una capa negra que cubría su cuerpo, con un cuello hecho de plumas negras levantadas hacia arriba.
—¿Quién es usted? —yo estaba confundida.
—¿No me reconoces? —dijo ella—. Soy la peor enemiga de tu madre: la Reina Umbra.
No recordaba que mi madre hablara ni una sola vez sobre ella.
—Ella intentó alejarte de mí pero finalmente te encontré: ni en Equestria pudo lograr que tú estuvieras a salvo.
Estuve a punto de preguntar cuando la voz de Norah interrumpió.
—Terminemos rápido con esto, madre.
La miré y noté que mi amiga caminó hasta colocarse al lado de la Alicorn.
—Gran trabajo, mi querida Nox —le dijo Umbra con una actitud maternal.
—¿Nox? —pregunté—. Norah, tú...
—Mi verdadero nombre es Nox, solo me gané tu confianza para que me siguieras hasta aquí.
Ella me sonrió con maldad. ¡No lo podía creer! Se supone que ella era una pony con el elemento de la luz.
—Bien, basta de charlas —dijo la reina Umbra—. ¡Desaparece!
Ella me lanzó un hechizo y yo me cubrí con mis alas. Sentí un gran dolor y caí al suelo. Desde ahí podía escuchar la plática de la reina y de Nox.
—¿Por qué no murió?
—¡Está protegida por un encantamiento! —escuché gritar a Umbra—. No importa, ya pensaré en algo. ¡Encierra a la potra en los calabozos!
Intenté moverme pero me sentía cada vez más débil por el hechizo, hasta que finalmente me desmayé...